viernes, 31 de enero de 2014
¿Quedamos?- Enero
Hola!!!
El último día del mes, nos juntamos entre amigas a compartir una tarde de plática, de ideas, proyectos e intercambios. Estos encuentros los organiza María José, De Todo un poco. En esta ocasión es el primero de muchos que seguramente compartiremos.
Pues bien, les cuento que en la zona donde vivo, uno de los árboles autóctonos es el Algarrobo. Y en casa, por suerte, tenemos uno de ellos. Es precioso su follaje y su tronco leñoso. Todos los que me visitan se quedan maravillados con él y me ruegan que no lo vaya a sacar. Ni por casualidad se me ha ocurrido deshacerme de él. Me encanta.
Sin embargo me da lástima que mi Algarrobo, después de un viento, quede asfixiado por bolsas plásticas que se enredan y encajan entre sus ramas. Ni el viento ni el pobre árbol tienen la culpa. Simplemente nosotros somos los culpables que muchas veces no tomamos conciencia de los residuos que producimos y que arrojamos en cualquier lugar como la vía pública.
Y no sólo mi pobre Algarrobo se ve afectado por esta falta de conciencia ambiental sino muchos árboles a los costados de las rutas, de distintos espacios verdes que son amenazados no solo por bolsas entre sus ramas sino por muchos residuos más que muchas veces se posan cerca de ellos.
No sé si están de acuerdo conmigo, pero sinceramente ¿No es hora de que repensemos algunas cosas como estas?
Por si les interesa y además les gusta les dejo tres propuestas que suelo poner en práctica para reciclar mis bolsas plásticas y que no terminen rodando por cualquier rincón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario