La costumbre de ofrecer el día a Dios también la vivían los primeros cristianos:"apenas despertar,antes de enfrentarse de nuevo con el trasiego de la vida,antes de concebir en su corazón cualquier impresión,antes incluso de acordarse del cuidado de sus intereses familiares,consagran al Señor el nacimiento y principio de sus pensamientos".
San Pablo exhortaba a los primeros cristianos a ofrecer todo su día a Dios.En este momento de Adviento,no perdamos lo importante,el encuentro con Dios hecho hombre,con frío,con hambre,con cansancio.....como tú y como yo.¡Cuántas veces me he repetido sus palabras:"que pase de mi este cáliz"para luego añadir "que sea tu voluntad y no la mía".
Es bonito adornar las casas,las ciudades,pero da mucha más paz y sentido ,comenzar el día con oración y si es posible con misa.Os aseguro que esa paz no la vais a encontrar en ningún otro sitio.
San Pablo exhortaba a los primeros cristianos a ofrecer todo su día a Dios.En este momento de Adviento,no perdamos lo importante,el encuentro con Dios hecho hombre,con frío,con hambre,con cansancio.....como tú y como yo.¡Cuántas veces me he repetido sus palabras:"que pase de mi este cáliz"para luego añadir "que sea tu voluntad y no la mía".
Es bonito adornar las casas,las ciudades,pero da mucha más paz y sentido ,comenzar el día con oración y si es posible con misa.Os aseguro que esa paz no la vais a encontrar en ningún otro sitio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario